Es un amor que perdura a pesar de las circunstancias adversas, que se mantiene firme en la adversidad y que busca el bienestar del ser amado por encima de todo.

Distinguir entre la atracción y el amor verdadero es elementary para tomar decisiones más acertadas en nuestras relaciones. La atracción es una respuesta emocional y fileísica que puede ser fugaz, mientras que el amor verdadero implica una conexión emocional y espiritual más profunda y duradera.

El amor incondicional implica amar a alguien sin importar sus acciones, defectos o circunstancias. Es un amor que trasciende las limitaciones y se basa en aceptar y valorar a la otra persona tal como es.

El amor verdadero implica aceptar a la otra persona tal como es, con sus virtudes y defectos, y estar dispuesto a crecer juntos a lo largo del tiempo.

Promueve la empatía: Al amar incondicionalmente, se desarrolla la capacidad de ponerse en el lugar del otro y comprender sus sentimientos y necesidades. Esto favorece una mayor conexión emocional con las personas que nos rodean.

En la period de las citas rápidas y las relaciones fugaces, a veces puede resultar difícil diferenciar entre una simple atracción y el verdadero amor.

Sor Juana reclamó al hombre la injusticia sobre la mujer y abandonó la oportunidad de amar a una persona por amar la sabiduría de los libros y se instauró en un convento. Quizá la única forma de entenderlo es en palabras de su poema “Amor empieza por desasosiego”

En la infancia, es el amor a los padres y al crecer, el amor cambia de cara, pero no de sentimiento. Jung dijo:

Sin embargo, es importante comprender que son conceptos distintos que pueden coexistir pero que no son lo mismo. A continuación, te explicaré las diferencias clave entre la atracción y el amor verdadero:

No hay culpa en escoger algo distinto. Las relaciones hoy pueden ser abiertas, cerradas o un paso medio entre ambas. Cada quien puede poner límites y saber hasta donde puede llegar o qué puede esperar.

El amor verdadero va más allá de lo superficial y se basa en el respeto y la confianza, mientras que el deseo pasajero se centra principalmente en la atracción física y busca la gratificación private.

El verdadero amor consiste en crecer juntos, no apresurarse a encajar en una versión idealizada de lo que debe ser una relación.

El amor más puro y verdadero se caracteriza por ser incondicional y desinteresado. No busca obtener beneficios o gratificaciones propias, sino que se enfoca en el bienestar y la felicidad del otro.

Algunas señales de que estás experimentando amor verdadero incluyen sentirte seguro y protegido en la relación, compartir valores y objetivos similares con tu pareja, confiar plenamente en ella y sentirte feliz y completo cuando estás click here junto a ella.